Washington, D.C., 16 de junio de 2025. – El expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, rechazó un plan israelí que tenía como objetivo asesinar al líder supremo de Irán, el ayatolá Alí Jamenei, según revelaron dos fuentes cercanas a la administración. Esta decisión se produjo en medio de una escalada de ataques entre Israel e Irán, que ha mantenido en vilo a la comunidad internacional.
La información fue confirmada por un alto funcionario estadounidense a CNN, quien afirmó que Washington comunicó su oposición a Israel, por orden directa de Trump, lo que detuvo la ejecución del plan. Trump, quien públicamente ha buscado proyectar una imagen de pacificador, estaría interesado en evitar una guerra prolongada en Medio Oriente, consciente del costo político y militar que implicaría para su país.
A pesar del rechazo al ataque, la administración ha continuado ofreciendo apoyo defensivo a Israel, incluyendo la interceptación de misiles iraníes. Sin embargo, no ha dado señales de querer involucrarse en acciones ofensivas directas contra Irán, a pesar de las presiones de algunos sectores republicanos.
El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, negó públicamente los informes, calificándolos como “falsos”. Mientras tanto, dentro de la Casa Blanca persiste el debate sobre cuánto involucramiento sería prudente en este conflicto, cuyo desarrollo sigue siendo incierto.
Trump, en sus redes sociales, reiteró su deseo de evitar una guerra y mantener abiertas las vías diplomáticas. Aun así, advirtió que cualquier ataque directo de Irán a intereses estadounidenses podría desatar una respuesta militar “a niveles nunca antes vistos”.
El conflicto ha generado alarma global, y se prevé que las operaciones israelíes continúen durante varias semanas, con el conocimiento y aprobación implícita de Washington, aunque sin un compromiso formal de intervención militar ofensiva por parte de Estados Unidos.
